Xalapa, Ver., 17 de mayo de 2021
COLUMNA MÁS CLARO NI EL AGUA POR: FELIPE MENDIOLA
Las campañas políticas para alcaldes y diputados locales en Veracruz, comenzaron el 4 de mayo y concluirán el 2 de junio, es decir, hoy estamos a la mitad de ese periodo y con esa apatía que se han comportado algunos candidatos, sencillamente no van a ganar las elecciones y lo peor es que ellos lo saben.
Son 14 partidos en contienda, 6 de ellos en coaliciones de 3 cada uno y, con eso, pues en algunos municipios hay 8 candidatos registrados, aunque no en todos las municipalidades aceptaron esa alianza y se fueron solos, tal vez, inmensamente solos.
Muchos nunca tuvieron una estrategia, porque tampoco tenían experiencia en la actividad política y pensaron –seguramente- que haciendo reuniones y subiendo videos y fotografías en Facebook, ya estaban en el ánimo del electorado y ese ha sido un error garrafal.
Algunos ni siquiera tuvieron jefe de comunicación, entonces entre todos le echaban montón a alguna actividad que realizaban y con fotografías descuadradas, con sombras las subían a las redes sociales y sencillamente no tenían el efecto que supuestamente esperaban.
Los próximos diputados federales debieran legislar al respecto, porque no es posible distraer recursos humanos y financieros en campañas, otorgando prerrogativas a esas siglas que seguramente “morirán” después del 6 de junio, porque ni siquiera van a calificar para mantenerse como partido.
No quisiera incurrir en un criterio antidemocrático, pero son demasiados partidos de los cuales muchos no cumplen con lo más elemental y pareciera que hasta hoy, no hay autoridad que pueda intervenir para que no suceda lo mismo dentro de tres años.
No lo platique, pero en algunos casos los dirigentes de algunos de esos institutos políticos los tomaron como negocio, porque los militantes se quejaron de ese comportamiento e incluso renunciaron a continuar participando.
Los candidatos serios y que todavía demostraron algo de responsabilidad están a tiempo de reparar el daño que hicieron de su propia imagen, allegarse gente con experiencia, con buenos operadores políticos y con buenos comunicadores, porque de lo contrario, van directo al fracaso. MÁS CLARO NI EL AGUA.
